Las palabras rezar y orar son aceptadas tanto por la Real Academia Española (RAE) como por la Asociación de Academias de la Lengua Española como sinónimos. Estricta y lingüísticamente hablando, ambos términos poseen el mismo significado; acción de dirigirse oral o mentalmente a una figura religiosa superior para pedir, agradecer o comunicar algo. No obstante, dentro de la tradición religiosa judeo-cristiana, ambas palabras tienen acepciones distintas.
Orar es dirigirse a Dios con la finalidad de comunicarse con Él, aceptando su omnipresencia, su bondad y confiando en su juicio. Al orar se lleva a cabo un diálogo que puede materializarse de muchas formas. Una de estar es rezando.
Rezar es la acción de vocalizar y exteriorizar una oración; es decir, es orar en voz alta.
Ver cuadro de Diferencias
Escribe aquí el resto de la entrada