Y para ello debo referirme primero a Billy Graham. En oportunidad de contar con 99 años, el Evangelista compartió un mensaje especial a las personas animándolas a leer la Biblia y a Orar. El mensaje se titula: “DOBLE LAS RODILLAS Y ORE, HASTA QUE TU Y DIOS SEAN AMIGOS INTIMOS”.
Este mensaje fue publicado el 13 de Noviembre de 2017 y el falleció 3 meses después, el 21 de Febrero de 2018. Hoy quiero traer ese mensaje y compartirlo con Uds. El mundo cristiano se vio conmovido con la muerte de Billy Graham, no obstante sus enseñanzas sobre Jesús perdurarán por siempre, dejando un legado de sabiduría y de conocimiento importante sobre Dios.
Graham, grabó un video donde continuaba animando a las personas a buscar de Dios, a creer sin restricciones, sin pensar que sería su último material en esta vida.
“He estado orando para que tengamos un despertar espiritual“, dijo Graham en esta grabación.
“Creo que eso se hace posible solo cuando los individuos entregan sus vidas nuevamente a Cristo". “Primero, debemos hacer todo lo posible para seguir los pasos de Jesús. Vivir una vida en la que nos amemos unos a otros, nos ayudamos unos a otros y vivimos de acuerdo con su palabra como lo hizo Jesús”.
“El Espíritu Santo es quien nos ayuda a vivir ese nuevo estilo de vida. Es uno de amor, mansedumbre y paciencia, y todas estas cosas son los frutos del Espíritu”, agregó.
Graham hizo hincapié en la importancia de leer la Biblia todos los días.
“Lees su Palabra todos los días la Biblia. Sé que es muy difícil, pero tienes que empezar en alguna parte y te sugiero que comiences con el Evangelio de Lucas en el Nuevo Testamento y en el Antiguo Testamento con el primer versículo ‘En el principio, Dios’ ”.
Graham señaló que la intimidad con Dios es esencial, y esto debe lograrse a través de la oración.
“Ponte de rodillas y reza hasta que tú y Dios se hayan hecho amigos íntimos”, dijo. “No puedo describirte la alegría y la paz que da como resultado de la rutina diaria que tienes”.
Graham también compartió consejos sobre cómo las personas pueden vivir verdaderamente la vida cristiana.